Respecto a los hombres modernos de la burguesía bilbaina, adquieren un protagonismo en la vida pública de las ciudades, ya que participan de los grandes asuntos que la modernidad establece como importantes lo que les sitúa en un plano diferente, alejado del de las mujeres, que, en principio, no tienen acceso a asuntos como la empresa, la industria, la banca, la política, la guerra, la paz…